SENSUALIDAD DE ALTO RIESGO
EN EL METRO DE SANTIAGO

Era una mañana como cualquier otra en el tren metropolitano. Andenes y carros atestados de gente que demostraban prisa por llegar a un destino predeterminado por misteriosas fuerzas que dominaban en las sombras. Yo sólo era un peón más, un binario perfectamente programado y que calzaba de manera precisa en el gran ordenador. Fue entonces cuando las vi...


A la mañana siguiente otras jovencitas, aprovechando las cada vez más frecuentes detenciones de los carros y ya advertidas de nuestro vivo interés en observarlas, comenzaron a acicalarse de modo sensual. Fue así que los delineadores cumplían con la tarea de renacer bellos ojos femeninos y la paleta de rimel, dibujaba cual artista los rostros de nuestros objetos, a esas alturas, ya deseados. Cada una de ellas competía por nuestra atención total y se nos dificultaba optar por sólo una de ellas. El torneo se desató y alcanzó niveles inauditos. Cada día poseía su afán. Nosotros, absolutamente agradecidos, tomabamos palco para presenciar el encuentro de cada mañana.

Traté de abstraerme de tal horrorosa situación y dirigí mi vista hacia otro lugar, lejos de esas endemoniadas mujeres. Confieso que no me agradó lo que descubrí. Dos muchachos intercambiaban aviesas miradas en las que creí descubrir el que sería el germen del torneo masculino que se avecinaba. Si prospera esa maldita idea (y creo que nada la detendrá) optaré por viajar definitivamente en las destartaladas micros viejas. Por lo menos, en ellas nadie desea probarle nada a nadie. Además me da escalofrío pensar cuando aquellos jóvenes, arrastrados por el insano deseo de vencer a cualquier precio, acaben portando filosas navajas y se afeiten en seco, usando los vidrios de las puertas correderas como improvisados espejos mientras los carros del Metro se desplazan por la capital.
Esto de las coincidencias es realmente increíble. Primero fue aquello de los Beatles que grabaron un tema llamado "She's Leaving Home" (Ella se va de casa) casi al mismo tiempo que Serrat grababa "¿Qué va a ser de tí lejos de casa? hacia fines de los 60. Y ahora es Tito Díaz quien casi simultáneamente con la aparición de una "performer" en los vagones del metro de Santiago, publica su cuento Tedio productivo con similar temática. Espero seguir encontrando más de este material que nos hace seguir estableciendo conexiones.
ResponderEliminarSam the Ham
excelente cuento!
ResponderEliminaraunque no comparto tu idea que en algun mometo se creará el pandemonium,porque el chileno es apocado y mamón, aunque son agradables jajaja).
espero volver a leer cuneto de la distopía en lugar tan cercano como e nuestro ya no olvidado pedazo del mundo
saludos papa
pd:chuck norris te mata 5 veces antes de caer al suelo