Sin ninguna razón, una noche de luna se convirtió en hombre lobo. Asustado, permaneció escondido varios días en su departamento de Plaza Italia. La semana siguiente enfrentó la realidad. No lo hubiera intentado jamás. En su trabajo de la Municipalidad lo despidieron por desaseado y su novia le dio calabazas porque los machos peludos le repugnaban. Probó suerte con lo alternativo. Los punk y góticos del Paseo Ahumada lo corrieron por ausencia de glamour y en una discoteca lo trataron de desubicado, ya que era noche de vampiros. Hastiado, abandonó la capital rumbo a Hollywood. Ahí encontraría trabajo y amigos verdaderos.
martes, 27 de noviembre de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
ya lo habia leido, pero ta´ muy weno!!!!
puedes mejorar el final, pare hacerlo más intrigante!!
ya que como los dibujos, las narraciones, cuentos, novelas, etc nunca las terminas!
xao
Publicar un comentario