lunes, 28 de septiembre de 2015

Un profesor chileno en Inglaterra (II parte).



Inglaterra, el país del ladrillo edificado.

Henos aquí nuevamente y finalizando nuestra quinta jornada en UK. La “Brickland arquitectónica”, la tierra de las edificaciones en donde el ladrillo es el pilar fundamental e ícono del paisaje urbano y suburbano. Si existe un espacio vital en donde este paralelepípedo adquiere las más bizarras y bellas combinaciones es precisamente aquí. Castillos, edificios públicos, condominios, incluso hasta la más modesta vivienda es estructurada con este noble material.
El pasado miércoles las muchachas y muchachos asistieron a sus clases regulares durante la mañana y en la tarde ocuparon las extensas dependencias de la otrora academia de policía, para practicar canopy, aerobola, y construcción de objetos con piezas de mecano gigante, entre otras. Llegada la noche, previa pichanga en el gimnasio (afuera la lluvia arreciaba), participaron de una pequeña fiesta que tuvo un sabor latino, cuando ingresaron italianas e italianos de cursos menores. Aunque es difícil de creer, los nuestros se retiraron exhaustos, porque el día siguiente sería intenso. Nos esperaba nuestro primer viaje a Londres.
Londres, la ciudad mágica en donde aterrizó Mary Poppins, sobrevoló Peter Pan e impartió justicia V de Vendetta. Partimos hoy jueves, temprano en la mañana y previo desayuno inglés. Recorrimos durante dos horas la campiña bretona y arribamos a la capital. Nuestra primer destino, el Museo Británico. Este lugar es una gran y memorable síntesis de nuestra historia mundial. Invaluables reliquias de las culturas  mesopotámica, egipcia, griega y romana, cunas de nuestra civilización. Solo por nombrar algunas piezas al azar visitadas por nuestros alumnos: la Piedra Roseta descifrada por Champolion, sarcófagos de granito de Mery Mose, esculturas de la Grecia y Roma antigua y un largo etcétera que incluye arte medieval, el árbol de la vida africano y el moai rompeolas de Rapa Nui. Finalmente, nuestro periplo nos llevó al Museo de Madame Tussaud’s. Un ecléctico lugar en donde conviven figuras de cera de la talla de la familia real, inmortales escritores como William Shakespeare, Oscar Wilde y Charles Dickens y los científicos Isaac Newton y Einstein que cambiaron el mundo para siempre. No podemos dejar de mencionar el show business internacional de todos los tiempos, nombres del rey Elvis Presley, los Beatles, Marilyn Monroe y Charles Chaplin, como también Pelé, Tiger Woods y Mohamed Alí, figuras del deporte de todos los tiempos.
Es hora de regresar, cansados, alegres y pletóricos de imágenes que no olvidaremos el resto de nuestras vidas y que se serán tema recurrente en la conversación familiar, cuando volvamos a Chile…, pero para ello… faltan más de dos semanas...

viernes, 25 de septiembre de 2015

Sicario de mascotas (I parte)


Santiago de Chile es una ciudad cuasi-olvidada de la memoria de los hombres. Aún así insisto en vivir y trabajar en ella. No me acostumbraría a otra urbe. Es como si fuera el espejo de mi alma, mi sosías. En la investigación privada me fortalezco, lamentablemente, no forma parte de los servicios de primera necesidad de esta paupérrima gente que habita la desolada cuenca capitalina. Los casos escasean. Aunque la aliteración se me dio esta vez, no hay caso. Realmente el laburo ya no da para más. Sólo ronda en mi mente la última investigación para la que fui contratado y que me reportó un poco de "lana" y otro poco de tragicomedia... el caso es como sigue...

Me encontraba postrado en mi desvencijado sillón de imitación de cuero, observando el desorden organizado de mi oficina, cuando una atribulada joven, que frisaba los 30 años, ingresó tímidamente. Era de mediana estatura y una vez que se desprendió de sus gafas negras, comprobé sus rasgos que delataban antepasados del medioriente. Vestía elegantemente.

- El señor Manuel Urbina, dijo con voz temblorosa, pero dulce.
- El mismo que viste y calza 48, contesté con mi ausencia absoluta de empatía.
- Necesito sus servicios... Mi perrita Chau - chau fue asesinada.

Entenderán que hice un gran esfuerzo para no desternillarme de la risa. Le expliqué que mi negocio abarcaba solo casos que involucraran humanos o algo similar a ello. Inmediatamente dejó en la mesa un fajo de billetes verdes que encandilaron mi razón. Acepté en el acto. Las cuentas me atosigaban y esta bella dama podría ser el vehículo de mi salvación.

Entre sollozos me contó que su mascota era lo más preciado que poseía en este mundo y que su deceso la tenía devastada. Su único objetivo era descubrir quien o quienes se encontraban detrás de tan deleznable homicidio canino. La tranquilicé, solicitándole todos los datos que ella pudiera entregarme. Nombre de la mascota (se llamaba Almendra); raza (que ya la había entregado al ingresar a mi oficina) y cementerio en donde se encontraban sus restos.

Mis primeras diligencias se encaminaron a conseguir un certificado para una exhumación y la posterior compañía de Peñaloza, un tanatólogo caído en desgracia por una acusación de un supuesto tráfico de órganos aún no probado y que le deterioró la imagen de por vida. Actualmente es un bebedor consuetudinario del bar Panamá, un tugurio ubicado en la comuna de Ñuñoa y atendido por la señora Pilar, desde la década de los cincuentas.

                                                                     (Continuará).

Un profesor chileno en Inglaterra (I parte).



Noticias desde UK… ¡por fin!

Luego de una laaaarga travesía aérea por el Atlántico y una fugaz visita a la Madre Patria, por fin nos encontramos entre los Bretones. La tierra del bárbaro jefe tribal, Cassivellaunus, del indomable Enrique VIII, de la inigualable Reina Victoria, del Cuarteto de Liverpool y la próxima conquista deportiva de Alexis Sánchez.
El punto de llegada el domingo fue Grovesnor Hall, ubicado en la localidad de Ashford, un hermoso lugar que antaño fue una academia de policía. Cómodamente instalados, nuestras muchachas y muchachos en gira de estudios, comenzaron el lunes sus clases en la mañana y actividades deportivas en la tarde. Hoy, martes, el programa, previa visita mañanera a las aulas, nos llevó a Hastings, el mismo lugar donde Guillermo, el Conquistador, en 1066 inició la expansión normanda a Inglaterra. Hastings es un puerto ubicado al sur de la isla y que posee personalidad propia, tanto así que se digna a bañar sus costas nada menos que el Canal de la Mancha. Recorrimos sus principales calles, en donde el sello de la arquitectura y diseño bretón nos hacía las veces de una postal hiperrealista. Sus habitantes, en especial los más jóvenes, dan cuenta de un espacio cosmopolita, en donde son capaces de convivir la tradición, la vanguardia y la tolerancia.
Al atardecer, retornamos a Ashford, convencidos de que esta experiencia recién comienza y que la viviremos lo más intensamente posible. Así que, ojos bien abiertos y mente amplia para extraer hasta la médula de lo que se nos viene por delante.